Día Mundial de la Dermatitis Atópica

El 14 de septiembre se conmemora el Día Mundial de la Dermatitis Atópica, una enfermedad de la piel no contagiosa que tiene un gran impacto emocional y social en quienes la padecen. Este día busca sensibilizar y concienciar a la población sobre los efectos afectivos, sociales y laborales de esta condición.

Datos de España

En España, aproximadamente 2 millones de personas sufren dermatitis atópica, y un 30% de estos casos son de moderada a grave. La prevalencia de esta enfermedad se ha triplicado en los últimos 30 años.

Dermatitis atópica ¿qué es y cuáles son sus síntomas?

La dermatitis atópica, también conocida como eccema atópico, es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel que se caracteriza por una intensa picazón y la presencia de lesiones y heridas cutáneas.

La dermatitis atópica no es contagiosa y puede ser hereditaria. Aproximadamente el 60% de los casos se diagnostican en el primer año de vida, afectando tanto a niños como a adultos.

Existen causas pueden ser ambientales que empeoran la enfermedad, como el frío, cambios de temperatura y polvo, así como el uso de tejidos sintéticos y detergentes agresivos.

Los síntomas principales incluyen manchas rojas o marrones, piel seca y agrietada, brotes recurrentes de eccemas y picazón intensa. En los bebés pueden aparecer pequeñas protuberancias en las mejillas.

La dermatitis atópica puede volverse de moderada a severa, con brotes intensos que afectan la salud del paciente y pueden estar asociada con asma, alergias y otras patologías. Las consecuencias pueden incluir trastornos del sueño, distanciamiento social y, en niños, un impacto negativo en el rendimiento escolar.

Diagnóstico y tratamiento

El diagnóstico de la dermatitis atópica lo realiza un dermatólogo mediante la exploración de la piel y la revisión de antecedentes personales y familiares. Se pueden hacer pruebas cutáneas para evaluar la reactividad de la piel.

El tratamiento incluye mantener una buena higiene de la piel, usar cremas antibióticas o con corticoesteroides u otras recomendadas para la patología, tomar antihistamínicos y corticoesteroides orales, aplicar vendajes húmedos con corticoesteroides, y realizar fototerapia. También puede ser de gran ayuda, en caso necesario, apoyo emocional con terapias psicológicas.

Otras recomendaciones son visitar al dermatólogo regularmente, tomar baños cortos con agua templada y jabón especial, secar la piel sin frotar, evitar alérgenos, hidratar la piel diariamente, usar ropa de algodón, evitar temperaturas extremas, usar protección solar y seguir una dieta equilibrada pero rica en verdura y fruta.

Paciente de dermatitis atópica por un día

La Asociación de Afectados por Dermatitis Atópica (AADA) invita ‘vivir’ la experiencia en primera persona y conocer con mayor profundidad a los retos que se enfrenta una persona adulta con dermatitis atópica. De esta vivencia se pueden sacar las siguientes conclusiones:

• Dieta: Es conveniente una dieta que incluya frutas y verduras, carnes blancas, pescados a la plancha, leches de origen vegetal y semillas como el arroz o la quinoa. Aunque es fácil de seguir en casa, puede ser más difícil fuera de ella.
• Vestimenta: Se recomienda usar tejidos de algodón al 100% para mantener la piel fresca y seca, evitando picores. Es aconsejable llevar ropa de cambio en caso de brotes que puedan manchar. Esto es especialmente problemático para quienes deben usar uniforme en el trabajo, ya que no siempre cumple con estas necesidades.
• Dormir: Los picores pueden ser insoportables y despertar a las personas durante la noche, llevándolas a rascarse inconscientemente. Para prevenir esto, se recomienda dormir con pijama de pantalón largo, camiseta de manga larga (100% algodón) y calcetines en las manos. Este atuendo puede ser incómodo en verano. Además, dormir acompañado puede ser problemático, ya que los despertares nocturnos pueden molestar a la pareja y afectar la relación.
• Higiene diaria: Después de una noche de sueño interrumpido, se debe tomar una ducha con agua fresca y jabones específicos para la dermatitis atópica, que no siempre son económicos ni eficaces. El secado debe ser suave para no irritar la piel, seguido de la aplicación de cremas costosas que requieren tiempo para secarse.
• Cosméticos eficaces: El proceso de encontrar productos efectivos es a menudo de prueba y error. Es habitual acumular geles, champús y cremas que pueden no hacen demasiado efecto. Lo mismo sucede con el maquillaje y los perfumes, que se aconseja evitar para prevenir brotes, aunque a veces se usan para ocultar los efectos de la enfermedad, lo que puede empeorarla.

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